Beauty Port

Me gustaría comenzar reconociendo la amabilidad y la cortesía recibida, las personas con las que interactué fueron muy atentas desde el principio. Sin embargo, el servicio realizado me dejó insatisfecho y debo mencionar que mis uñas quedaron dañadas. Hace dos semanas fui a hacerme un esmaltado semi permanente, el cual resultó ser muy caro (12000, en comparación con otros lugares donde cuesta incluso menos de la mitad), y al momento de retirarlo, mis uñas quedaron lastimadas y debilitadas. Entiendo que el proceso puede tener ciertas consecuencias, pero dudo que sea necesario llegar a un punto en el que la uña esté ROJA Y DUELA al tacto para remover un producto, especialmente cuando informé a la persona que me atendió y aún así me causó dolor. Me siento decepcionado con el servicio recibido y por ello, no volveré a este lugar. Adjunto una foto.

Estoy cansada de ser tratada como una cliente de segunda. He sido clienta por varios años y la calidad del servicio ha ido empeorando. La atención es pésima, nunca te atienden a tiempo aunque tengas turno. Como mínimo, esperas 20 minutos porque aceptan clientas sin turno solo para facturar más. Además, los precios varían según la apariencia del cliente. En los últimos tiempos, ha habido mucha rotación de personal y el trato es desconsiderado. No recomendaría este lugar.

Decidí hacerme las uñas sin cita previa, fui al mediodía de urgencia porque tenía un evento por la noche y pudieron atenderme. Después de 25 días, mis uñas siguen intactas, solo se han desprendido algunas decoraciones pequeñas, pero el trabajo de uñas esculpidas fue impecable, finas y sin imperfecciones. El servicio duró dos horas y tuvo un costo de $6000. Por este motivo, le resto una estrella, ya que considero que el precio es un poco elevado para una atención buena pero común.