Aunque realicé quejas de forma interna, no las había hecho por este medio. Muchas de las críticas expresadas en Google son ciertas, hay cierta publicidad del lugar, pero he tenido malas experiencias con algunos profesionales que atienden en este centro. La dra. Violeta Schneider en su momento me quemó la cara para sacarme unas verrugas, sin anestesia y de una manera brutal, nunca vista en la historia de la dermatología. Las manchas quedaron y la clínica NO SE HIZO CARGO de ese tema. Con la cosmetóloga Felicitas también tuve inconvenientes, ya que al parecer les molesta que uno cancele turnos (le aclaré que no fue mi intención y le pedí disculpas), aun así NO me quiso reprogramar el turno, un papelón. Mi consejo: atentos a la economía actual, busquen al mejor profesional (y si es empático, mucho mejor). No acepten imitaciones :)